sábado, 26 de noviembre de 2011

legal

Es, entonces, la legalización el camino marcado, el trazo a seguir, la senda abierta en la sociedad. Sólo así somos parte de algo que sólo nos escupe e impide salir. Sólo obtengo la libertad no fuera de la ley, sino dentro de ella. Demostrando mi individualización dentro del modelo. Ya que fuera de él, soy parte de su antinomia. Soy un fiasco que se revela por fuera. Desde dentro del sistema que carcome, me transformo en el cáncer del mismo fagocitando de a poco cada célula. Desde dentro sin dejarme contaminar. Siendo consiente del error y necedad de ellos. Actúo camuflada. En piel de obrero soy una salvaje y rebelde abeja. El objetivo entonces, no es transformar el sistema inútil, sino mantenerme fiel y firme en el centro de su putrefacción.

martes, 23 de agosto de 2011

Prosa de hoy

"eso es lo que tengo...
poemas
grandes muslos
pequeñas tetas
y

muchísimo amor" (*)

piel vibrante
larga cabellera
sonrisas en primavera
otoños
cardos
espinas
al sol como compañía

tengo dolor que se transforma en risa
uñas despintadas
puedo mirar sin decir nada

respiración fuerte y pausada
somos dos
yo y mi alma

segura, insegura
radiante y radio activa
seguramente viva

tengo pasto donde recostarme
abrazos que silban al viento
aliento
temor
prisa

¿ya dije que tengo sonrisas?
lágrimas
sudor
fuente
agua para beber
no siempre tengo sed
creo ser irreverente

rebelde y sumisa
alta, flaca y
petiza
puedo tocarme la punta de los pies
y decir te amo
a quien así lo resista.

(*) Ntozake Shange, para las chicas de color que han pensado en el suicidio cuando basta el arcoiris, Nueva York, 1976

lunes, 15 de agosto de 2011

suspiro que respiro

Se levantó un día en su mundo desordenado y se dio cuenta que la estaban asfixiando.
Poco a poco le sacaban el aire de sus pulmones.
Es dificil ser cuando te quitan el aliento.
Ella, la que te afixia, es la protagonista de tu vida. No sos dueña ni del aire que respiras. Te ahogas. No te dejan decidir ni decir. Sus palabras ocupan el lugar de tus palabras, no hay lugar para decir. Afixia.
Sólo escondida respiras.
Para decir tenés que gritar, gritar fuerte hasta que se digne a callar.
El aire es espeso y le cuesta salir.
Pegar un aullido para aprender a susurrar.
Hablar, decir, respirar.
Tu suspiro inspira libertad.


25 de Septiembre de 2009

miércoles, 27 de julio de 2011

locura insensata

Pienso en la locura y en la cordura.
En la sensatez.
Acaso, ¿no somos todos insensatos en un punto?
¿No nos es necesaria la incongruencia?
Cuando el ideal, la fantasía se cae,
¿No es necesaria la locura?
Ya lo cuerdo no tiene sentido,
ya lo supuestamente real no cabe en mi irrealidad.

Prefiero creer en lo invisible,
cuando lo visible no me satisface.
Salí de mi irrealidad para conocer lo real
y ahora quiero volver allí
A ese mundo donde todo era posible.

Pero es verdad ...
preferible haber visto la vida a la cara.
Haber sufrido, haber llorado, haber vivido.
¿Cuanto puede durar la fantasía?

Prefiero la locura, la insensatez; a la cordura.
Ella muchas veces no funciona
no nos llena plenamente.
Hace promesas que no puede cumplir.
Pretende decirnos como sentir, como vivir
La cordura es la amenaza constante de matar lo que hay en mi, quien soy.
Creo que sí

"De todo me quedo con los momentos, con las horas, con el amor"
Dejar la depresión cuando es sensato tenerla.
Permitir a la locura entrar y ser feliz.
Ver que cosas son las que me hacen afortunada
Aprender a sembrar en eso y desechar lo demás.

Reemplazar la melancolía por la locura,
y la nostalgia por la insensatez.
Tengo que acordarme de reír.
Permitirme hacerlo.
La cordura es el encierro en el que me encontré hasta hoy
y la responsabilidad mi yugo.

jueves, 14 de julio de 2011

teoría urbana dos mil siete

El eco silencioso de la voz de los pueblos. La multitud encarnada en un grito desde el barro y la tansa. El mismo grito de la carnada, la angustia y el dolor que también son esperanza. Quién se baja de su monótona rutina y escucha; quién hunde sus pies en la arena y el pescado podridos. Llenarse los pulmones de aguas negras ... en que universidad te enseñan dichas experiencias. Realidad confundida entre textos de prestigio, palabras viscosas que engordan. Letras confusas que ahogan el espíritu en un mar de glucosa. Pero nuestro mar es río y la arena se confunde con el barro, los zapatos de charol son alpargatas viejas. La ciudad es un pueblo invadido por buques extranjeros. Entonces, los gritos dirigen a los lápices; la voz del pobre diablo irrumpe. Trabajo y salud. Futuro y progreso. Quién será capas de responder, de decir, de hacer desde adentro.

martes, 14 de junio de 2011

inteligencia ignorante

Cuando la educación que poseemos está en manos del sistema que nos condiciona, que nos impone un rol dentro de la sociedad; esa llamada educación es ignorante. Las escuelas, los planes de estudio, la sociedad, los medios de comunicación se ocupan de "des" informarnos, de sólo decirnos lo que quieren que escuchemos, aplacando nuestra conciencia de clase, de raza y dejando sólo en sus manos las decisiones políticas y económicas mientras creemos en nuestra libertad por tener un teléfono celular de ultima generación que saca fotos hasta colgado de mi nariz. Es más perverso aún el tras fondo cuando desde cualquier medio al alcance la clase dominante hace creer que la llamada inteligencia es alcanzada por la acumulación de datos precisos y cada vez más específicos, datos provistos por otros que investigaron antes, datos indiscutidos o puestos a prueba sólo dentro de ciertos parámetros o paradigmas. En donde el ser inteligente es aquel capaz de repetir como loro estadísticas o formulas científicas sin saber para que corno sirven y sin poder plantearse la posibilidad de otra solución o siquiera la necesidad o no de tal formulación y si esta es o no fundamental para nuestras vidas. Ya lo dijo Cortazar en la voz de Etienne: "Hay una diferencia bien conocida entre el ignorante y el tonto, y cualquiera lo sabe menos el tonto, por suerte para él. Creía que el estudio, ese famoso estudio, le daría inteligencia. Confundía saber con entender." (CORTAZAR, Julio, Rayuela, Edit. Alfaguara, Pág. 570) Por esto cada vez más los planes de estudio de las universidades tienden a acotar sus tiempos recortando información en nombre de la facilidad, la universidad para todos, la salida laboral, etc; meras tristes excusas que lo único que ocultan es un plan anterior y macabro de manejo de información. Si las masas son cada vez más ignorantes, son más manejables; si la gente cree en que cierta cosa es verdad o no si lo dicen los medios masivos de comunicación, entonces el poder de los poderosos no tiene límite ni fin. Es tiempo de decir basta a todo esto. De entender que informarse es más que leer el diario o de mirar los noticieros que cada vez pierden más tiempo en la farándula; informarse de lo que pasa es empezar a tomarse el tiempo de pensar, de meditar en las cosas de ver las contradicciones y de releer cada cosa una vez más; de preguntarle al otro que piensa para entender que mi opinión de algo no es la verdad absoluta, de dudar de los gobiernos que nunca gobiernan para el pueblo, de dudar de la televisión que sólo se maneja en pos de intereses económicos; de educar a los que vienen atrás desde el planteo de problemas, desde la lectura de situaciones, desde el razonar, dudar, poner a prueba, desde la vereda contraria al conformismo de que las cosas se hacen así porque siempre se hicieron así. Empezar a ir en pos de la sabiduría más que de la mera inteligencia. Empezar a entender que lo más rico que puedo encontrar en mi vida es la persona que tengo al lado. "Quien nunca ha entrado en contacto con alguien diferente y ajeno, tampoco sabe lo que es él mismo. Tal contacto provoca dos cosas: comparación con y distinción de, pues sólo lo desigual o distinto admite comparación." LOWITH, Karl. El hombre como centro de la historia: Balance filosófico del siglo XX. Herder. Barcelona. 1998. Pag 264

domingo, 8 de mayo de 2011

Progreso idiota

Desición antropológica la de venir al sur. Hoy tomé conciencia de ello. Estudio de campo del ser humano en su "mejor" expresión. Lejos de la ciudad, vacacionando. Mostrando a flor de piel sus más grandes miserias como turista argento, o su mayor sonrisa al despertar. Al tiempo las limitaciones comunicacionales son insignificantes. El llamado "progreso" se transforma en otras cosas. Ya no en una antena de señal telefónica inalámbrica... sino en entender que es necesario el tratamiento adecuado de la basura. Eso es progreso. No un ringtone en tu oído, sino las bolsas plásticas por un lado, lo orgánico por otro, etc. Sino una cultura equitativa, un entender, o más bien ser concientes que los estándares establecidos, los parámetros de diferenciación, o llamemoslo clasificación (suena menos tajante), según nuestro nivel socio económico, cultural, etc. no tienen sentido. O es que acaso la sociedad no encontró bien la vía de progreso, esa autopista de cemento a la que acceden los que pagan peaje, sino vaya por colectora amigo; ese progreso que nos vendieron los que nos antecedieron, en donde la igualdad era el objetivo final. No vimos, o nos mintieron, que en realidad todos somos parte de este progreso... pero no todos cumplimos el mismo rol. Ud. puede tener un aparato de comunicación de última generación, mientras el niño que lleva de la mano morirá de cáncer antes de los 50 años. En donde ya no quedarán aguas potables y en donde sus nietos tendrán que pagar por al agua que nosotros y nuestro bendito progreso contaminó. Y es fácil hablar de acciones concretas, poner excusas y no hacer nada. Pero el problema está en nuestra mente. En como "clasificamos" nuestro alrededor. Cuando en nuestra búsqueda de verdad absoluta, nos situamos en el trono de esa verdad, nuestra verdad; y en donde desde esa mirada particular, ganada con tanto esfuerzo, me cago en el otro y justifico nuestras posiciones, justifico MI lugar. Que me gane con tanto esfuerzo. Y el que estudió por libre que parezca, es preso de su profesión y de los estándares de la misma. Y sí, sangro por la herida. Porque a veces ciertas miradas duelen, ciertos juicios molestan. Y no entienden, nadie entiende, que parte de lo que hago también habla de mí, de que el cuidado de ciertas imágenes es una mierda y que, como leí una vez: "vienen aquí (...) para mantener un mesianismo falso, que mejor harían en aplicárselo a ellos mismos." Y eso duele. Duele la putrefacción interna en copas fajinadas. Ahí el progreso pierde su rumbo, se convierte en mito pobre, ciego y auto referencial. Y algunos, sólo queremos ser libres. Por idiota que parezca, creo a veces, que este pensamiento, esta ansia de libertad es más real, más auténtica que cualquier otra imagen bien cuidada, que los modales externos cuando contamino tu tierra, tu casa y tu cielo. Mi libertad es más fuerte. Y tu búsqueda de la verdad absoluta, inequívoca ... absurda, morirá contigo. Mis hijos serán libres como yo, salvajes y correrán, amaran, soñaran, cosas más reales que tu pequeña idea de progreso.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Imagen de soledad

Hoy pensaba en la soledad mientras sacaba una foto. Ella me obliga a no aparecer. Y a la vez, me da ganas de mirar en vez de retratar. El paisaje sólo está. Lo retrato, pero no es igual. Mejor es estar. Fotografiaría mi sentir, mi cara al mirar el paisaje, mi expresión de paz. Eso me hace verme sola. Sólo otro podría retratar ese momento. Y un pensamiento llega... necesito eso? necesito al otro?
Tal vez no. Y esa sensación de poder sola, de hasta disfrutar a veces la soledad; de repente me asusta. Y entiendo que esta, mi soledad, no necesita a nadie.
Pero que ese temor, ese terror de amarla es la brecha que se abre en la nube.
Por eso amor... si quiero que vengas no es por necesidad, ni por conveniencia ni por obligación. Si te quiero aca, es porque te quiero. Es porque quiero que crezcamos, vivamos y muramos juntos. Es ... porque es amor lo que nos une.

viernes, 22 de abril de 2011

Prosa del 24 de Febrero de 2011

"Mi grito llegó al viento y con él voló lejos.
Para no quedarme sin voz, vino un viento más fuerte y me llevó con él.
Ahora estoy acá, donde sopla el viento.
Escucho mi voz, ahora más tenue.
Más sumisa, menos demandante.
Rendida.
Pero bien, en paz.
Profunda paz.
Sin certezas pasajeras, sólo absolutas.
Llena de incertidumbre.
Esa es mi voz hoy.
Escuchala por favor. Amala.
Porque es la voz que susurra después del grito.
Es la voz que se escucha a la orilla de los ríos.
Es ese idioma extraño que entienden sólo los que te prestan atención.
Sin prejuicios. En amor.
Es la voz auténtica. Distinguila en el murmullo.
Cerra los ojos y escucha.
Es tu propia voz que sobrevivió a la tempestad.
Es la voz del viento. Viene y va."

lunes, 18 de abril de 2011

utilízame

Leo: “dominio del signo como articulación entre un significante y un significado que queda objetivado en la pura función como valor de uso”. El ser humano llega a encontrarse en esta paradoja. Valgo según lo que hago, según mi función. Y el valor de esa función está dado por el sistema. Es mi valor de reventa. Es decir, cuanto vale mi tiempo. Y no cuanto vale en calidad, sino cuanto de él es redituable. Cuanto de lo que hago en mi tiempo es posible de cuantificar. Cuanto es ganancia. Pero siempre desde la mirada del sistema. O sea, que si uso mi tiempo para algo no redituable, entonces, pierdo el tiempo. Pierdo plata. ¿Gano otras cosas? Bueno, no importa. Si no gano dinero el sistema no lo puede medir. Por eso la mayor parte de la gente pretende estar “ocupada” en algo que le de dinero. Llámelo, trabajo. Aunque este nombre es cada vez menos apropiado. Cada vez más se gana plata por no hacer nada. Por no sudar. Por no pensar. Por hacer de cuenta “que”. Igual supongamos que todos somos felices. Que este estilo de vida nos sonríe. Pero no es así. El SIGNO y su PURA FUNCIÓN nos dominan. Se me pasa la vida en un rol que no elegí, que “debo” asumir. ¿Acaso debo hacerlo? Me pregunto. Y de verdad lo hago. Porque si debo hacerlo. Alguien me obliga. ¿La sociedad? ¿Mis semejantes? Acaso, ¿no nos obligamos todos a asumir roles impuestos, falsos, caretas? Bueno, me rebelo. Se que muchas de mis actividades dan como resultado funciones aceptadas; doy mi tiempo y con ello gano plata. Pero también hago otras cosas. Porque quiero. Porque sí. Porque me dan otras cosas. Ahora si el sistema quiere medir esos resultados y no puede…problema del sistema. Nosotros, no seamos hipócritas. Todos hacemos cosas sin ganancia aparente, visible para otros. Y las hacemos igual. ¿Somos lo que hacemos? O ¿Hacemos lo que somos? Las dos cosas. Pero cada vez más creo que soy lo que “hago porque sí”, en la intimidad, o delante de muchos sin que lo noten. Así no dejo que me dominen significantes de significados o viceversa. Soy mucho más que mis acciones. Soy cosas que no se pueden ver. Soy más que lo visible. Hasta a veces, soy invisible.

martes, 15 de febrero de 2011

Poseso

Extraño es pensar que el poseer cosas te transforma en alguien. Los objetos no son más que herramientas; que se usan para un fin. Si el fin son las cosas mismas, entonces, perdón, pero su vida no tiene sentido. Un hombre que vendió todo lo que tenía dijo una vez… ahora no poseo nada, o todo el mundo me pertenece. Por virtual, poético o estúpido que parezca este comentario, no lo es más ni menos que creer que nuestras posesiones nos caracterizan. Es en realidad una estrategia. Un manotazo de ahogado del sistema. Si creo que mis pertenencias me califican, entonces necesito tener ciertas cosas, modernas, lindas, nuevas, etc. Necesito cosas. Digamos igual que al sistema, no le va tan mal. Todos de alguna manera nos movemos por estas reglas, conciente o inconcientemente. Pero es así; y hasta a veces no nos queda otra. Debemos vestirnos, movernos, trabajar, vivir. No digo, entonces, que dejemos de tener cosas, no me malentiendan. Muchas veces los pensamientos distintos se rechazan de primera por extremistas. Si yo dijera: dejemos todo, dejemos las cosas, las ciudades y vivamos en el campo del fruto de nuestras manos (del sudor de nuestras frentes); todo lo que digo quedaría en una linda utopía y ya. Pero creo que el desafío es aún más difícil. Es vivir de esa manera en medio del sistema. Es tener cosas (lindas, valiosas, o no) y no creer que ellas hablan de quien soy. Es dejar de juzgar a los demás por sus posesiones. Es dejar de vivir mi vida en pos de ellas. Es entender que el ser humanos es ir un poco más allá. Y si, puede ser que el estar entre montañas me ponga poética; pero si así es, entonces encontré la mejor manera de vivir. Desprovista de posesiones reales o palpables. Pero como dice un amigo: ya tengo todo lo que no se puede comprar. ¿Acaso eso no vale oro? Tengo amigos, familia, amor. Tengo posibilidades; que por pocas que sean siempre hay alguien que tiene menos… sólo hay que mirar alrededor.